Publicar un libro nunca había sido tan fácil. Y autopublicar un libro tampoco. La autoedición no es nueva, siempre hubo personas que se financiaron sus propias ediciones, pero hoy en día este fenómeno es casi planetario.
La razón principal es el impulso que las nuevas tecnologías le han dado al sector, siendo posibles los libros electrónicos y distribuciones masivas y dándole entrada, literalmente, a miles de noveles autores con sus primeras obras al mundo de la literatura.
Las nuevas tecnologías permitieron que se abarataran los costes de impresión –tradicionalmente la parte más costosa de publicar un libro–, y la modalidad de autoedición siguió su curso pero a un coste casi cero.
Puntualicemos conceptos y hablemos de Bravo Ediciones, una editorial de autoedición que tiene ya un buen camino recorrido en nuestro país.
Qué es la autoedición:
La autoedición sucede cuando un autor decide autopublicar un libro asumiendo por completo los costes del procedimiento.
Es una edición independiente, no depende de ningún editor o editorial y el autor es quien decide sobre todos los aspectos relacionados con el diseño, distribución y venta de su obra, además, claro, del contenido, sin tener que pasar por un comité editorial.
Por otra parte, como no hay una editorial que respalde lo que se va a publicar, no tiene filtro, es decir, se publica tal y como el autor lo ha dispuesto.
Hasta hace algunos años, autoeditar un libro significaba poco menos que caer en un pozo negro literario, precisamente porque no había un comité editorial que avalara la obra ni crítica sobre la misma (recordemos que las editoriales convencionales cuentan con equipos profesionales que se encargan de leer y evaluar lo que se publicará).
De esta manera, autoeditar un libro era “saltarse” esta especie de control de calidad y asumir todo el riesgo.
Las dificultades para publicar siempre han existido, y esos filtros editoriales impedían que muchos escritores pudiesen acceder a la publicación de sus primeras obras.
Tomemos un caso emblemático que nos ayude a ilustrar el asunto. John Kennedy Toole, autor de La conjura de los necios, escribió su novela en 1962. La envió a muchas editoriales y todas la rechazaron. De hecho, murió sin verla publicada.
El autor se quitó la vida –por razones que no tienen que ver con publicar un libro– y años después su madre encontró el manuscrito, volvió a llevarlo a editoriales que volvieron a rechazarlo hasta que finalmente la editorial de la Universidad Estatal de Luisiana lo publicó.
La novela que todos conocemos fue un éxito editorial y ganó el premio Pulitzer en 1981. Si Kennedy Toole hubiese tenido la oportunidad de acudir a una editorial de autoedición, probablemente lo habría hecho. Y sería el mismo éxito editorial.
Qué hace una editorial de autoedición:
A quienes nos gusta la literatura suponemos que las editoriales son infalibles, pero no es cierto. Podemos ver en el mercado editorial un montón de libros que se han publicado en virtud de amistades, por ejemplo, sin respaldo de calidad.
De modo que, gracias a que las nuevas tecnologías abarataron los costes de publicar un libro, hoy es posible que literalmente cualquier persona lo pueda hacer. Por supuesto que tiene pros y contras, pero indudablemente hoy es una alternativa real a quienes publican por primera vez.
Una editorial de autoedición apoya al autor para autoeditar un libro; lo novedoso es que, aun cuando el escritor pague todo el proceso, la editorial cuenta con profesionales que leen el manuscrito, lo corrigen, lo diseñan y maquetan y finalmente lo publican, lo distribuyen y lo venden.
Muchas ahora ofrecen registro del ISBN y el Depósito Legal, para que el autor no se tenga que preocupar por estos detalles. Y aquí entra Bravo Ediciones, editorial especializada en autoediciones con mucha experiencia en el ramo.
Quién es Bravo Ediciones:
Como decíamos al principio, nunca como ahora ha sido tan fácil autopublicar un libro. En los últimos años han aparecido muchas editoriales de autoedición interesadas en apoyar a autores deseosos de publicar un libro.
Es el caso de Apuleyo Ediciones, que en 2018 abrió la modalidad de autoedición con Bravo Ediciones. Es un mercado emergente y tan exitoso que hasta los grupos editoriales tradicionales, como Random House, tienen su propio sello de autoedición.
En otras palabras, es una apuesta imperdible para todas las partes.
¿Qué hace Bravo Ediciones? Es sencillo decirlo: publicar un libro con el respaldo de un excelente equipo profesional. Lo sencillo puede hacerlo fácil, pero detrás del proceso hay gente que domina todas las áreas editoriales.
Cuando alguien decide publicar un libro con ellos, se pone en marcha un complejo, pero perfectamente engranado proceso: se hace una lectura para valorar la obra, se propone el presupuesto, se hace el contrato de edición, los trámites legales, se hace una prueba del libro y finalmente se imprime.
Pero la cosa no acaba allí. Autopublicar un libro significa asumir riesgos para quien escribe: no solo el coste de impresión, sino la venta y distribución de los ejemplares.
Publicar un libro con Bravo Ediciones quiere decir que ellos se encargarán de distribuir el libro, venderlo y hacer la promoción. ¿Y qué gana el autor? ¡Todo! Desde las ventas hasta el mantenimiento de sus derechos de autor.
Las editoriales convencionales normalmente le pagan al escritor el 10 % de las ventas, es decir, que si el libro cuesta en la librería 20 euros, recibirá 2 por cada libro vendido (o un poco menos porque hay que descontar el IVA).
Autopublicar un libro de este modo supone menor riesgo tanto para el autor como para la editorial, que en realidad no está arriesgando nada y a cambio le proporciona al escritor la oportunidad de ingresar al competitivo mundo literario.
Publicar un libro en la modalidad de autoedición permite participar en concursos literarios donde es preciso tener la obra publicada, e incluso ganarlos; permite participar en importantes ferias de libros y da presencia al autor en librerías.
Y lo mejor es que al publicar un libro de esta forma, el autor tiene un control total de todo el proceso, desde decidir el color y diseño de la portada hasta la cantidad de ejemplares que se imprimirán.
Bravo Ediciones trabaja profesionalmente y ofrece los servicios de edición, diseño y maquetación, corrección ortotipográfica y de estilo, obtención del ISBN y el Depósito Legal, distribución, venta y promoción, acompañando en todo momento al autor.