Si hay profesionales que te facilitan la toma de decisiones e incluso la vida laboral, son los asesores fiscales. Muchas veces, somos reticentes y pensamos que es un dinero que te puedes ahorrar, pero para cambiarte esta idea, hemos escrito este post, especialmente útil si buscas una Asesoría Fiscal Madrid.
Una de las figuras más importantes a la hora de tener una un negocio con actividad económica es la del asesor fiscal. Lo ideal es contratar sus servicios cuando se empieza la andadura empresarial. Este profesional es la persona que se va a ocupar del cumplimiento total de las obligaciones tributarias de las empresas públicas o bien de las personas físicas, ante la administración pública. Es decir, se va a ocupar de confirmar la calidez de las cuentas de la empresa, de deducir sus gastos …etc.
El asesor fiscal que contrates debe de ponerse al día de cada normativa, siempre actualizada que debe de respetar tu negocio. Pero también te debe de ayudar a encontrar ayudas o subvenciones, por si te interesan. Debe asesorarte en caso de tener trabajadores todo lo referente a sus salarios y el IRPF de los mismos, al tiempo que te hace las liquidaciones trimestrales del IVA de las empresas y de los autónomos, las cuentas frente a una inspección fiscal o bien las declaraciones del impuesto de sociedades.
Como sabes, todos lo burocrático lleva un tiempo que muchas veces no tenemos, es decir, que, delegando este trabajo, vas a ahorrar en tiempo que podrás dedicar a otras labores de tu empresa. Es muy complicado llevar al día un negocio, los trámites y la gestión de todos sus documentos, pedidos, ventas… Por no hablar del conocimiento que se debe de tener sobre cualquier obligación fiscal, y de forma actualizada, para no incurrir en ningún tipo de delito.
Algunas de las principales tareas de las que te puede liberar un asesor fiscal son:
- Estudio personalizado, asesoramiento y planificación fiscal.
- Asesoramiento sobre creación para nuevas empresas.
- Confección y presentación de las declaraciones periódicas fiscales tanto de particulares como de empresas. Declaraciones también informativas.
- Gestión de apoderamientos.
- Impuesto sobre el Patrimonio, sobre Sociedades, Impuesto sobre el Valor añadido, Y sobre la Renta de las Personas Físicas.
- Defensa fiscal de los contribuyentes, cualquier revisión fiscal, reclamaciones o bien posibles recursos.
Y muchas más tareas, desde asesoramiento a cumplimiento de obligaciones fiscales y burocráticas.
Hay que tener claro, que el éxito de cualquier empresa no solo radica en el sector en el que desarrolla su labor empresarial, si no en el personal que se encarga de los aspectos fiscales de la misma.
Descuidar cualquier obligación fiscal es sinónimo de fracaso laboral a parte de fraude o incluso delitos que pueden acarrear problemas tanto para la empresa como para los responsables de las mismas.
Piensa que no cualquier persona puede realizar cualquier trabajo, más cuando es éste de responsabilidad, y que, aunque pagar a un profesional es un gasto, a la larga es posible que te esté ahorrando mucho dinero o incluso haciéndote ganar más.
Esperamos que, con este post, tengas claro la relevancia de esta figura empresarial.