Elegir el aceite que lleva tu moto, no es algo que se pueda hacer al azahar. Si vas a comprarlo, verás que tiene numerosas letras, números y una serie de características que pueden hacer que dudes sobre cuál tienes que usar.
Imaginamos que a estas alturas ya sepas que hay varios tipos de aceite. Evidentemente la industria del motor, sabe que debe de haber tantos aceites, como consumidores, aceites que se adapten tanto a modelos de motos más antiguos como a los más nuevos. En el proceso de formación se usan ingredientes diferentes, derivados normalmente del petróleo. A esa base, se le añaden compuestos poliméricos que variará la densidad para mejorar el rendimiento, y dar unas propiedades más completas y complejas a cada tipo de aceite. Es decir, con las diferentes composiciones, se hace un aceite más específico.
Los aceites tienen 3 bases diferentes: sintéticas, semisintéticas y minerales. Las Sintéticas están realizadas gracias a la formulación química, que permiten unas características muy concretas, por lo que mejoran cualquier función, el problema es el alto coste que esto conlleva. Las Semisintéticas, están realizadas a base de componentes sintéticos y de los minerales, y suelen conseguir un equilibrio entre el rendimiento y el coste, lo que hacen de estas bases, las más usadas. Y las minerales, están realizadas directamente del proceso de destilación del crudo, son muy económicas, pero tienen un rendimiento mucho menos específico, más básico.
Las motos, tienen unas necesidades, mucho más específicas que un coche, por lo que necesitan unos aceites mucho más específicos que estos. Por ejemplo, la mayoría de los embragues no están húmedos, por lo que se necesita un aceite, que ofrezca una resistencia, como para que el embrague no patina, pero tenga la consistencia óptima para que permita a la caja de cambios trabajar protegida. También hay motos, que solo circulan por ciudad por lo que van a tener numerosas paradas y aceleraciones, y sin embargo hay otras motos que son usadas para hacer trayectos más largos a grandes velocidades, por lo que necesitan aceites muy diferentes. Con lo cual, una de las cosas que debes de tener claro, es el uso que le das a tu moto, además de la clase de moto que es.
Debes de fijarte en el grado de viscosidad. El primer valor, viene seguido de la letra W, y te indica la viscosidad en frío, y el segundo valor, la indica en caliente. Normalmente necesitarás aceites que se muevan en estos valores: 5W30 o bien 10W30.
También la calidad de aceite para moto, tiene unos valores que debes de observar, por ejemplo: SG o SL, y debes de saber que la segunda letra cuanto más avanzada esté en el abecedario, más moderno y mejor es el producto.
Lo que sí debe de tener es una calidad mínima exigida por el fabricante, ya que un uso de aceite inferior puede provocar un problema a tu moto. Y aunque te parezca mentira, piensa en la climatología de tu zona, y en los kilómetros que tengas que realizar. Todo influye para elegir el aceite.
